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Joven, con un año de antigüedad y contrato eventual, perfil del trabajador accidentado en la industria siderúrgica española
Mar, 18/10/2016
Conclusiones de un estudio del catedrático Ricardo Díaz Martín, profesor de la UDIMA, que opta a los premios Atlante y SCMST
El perfil del trabajador accidentado en la industria siderúrgica española corresponde a una persona entre 26 y 34 años, con menos de 14 meses de antigüedad en la empresa y contrato eventual, según concluye el ‘Estudio estadístico y modelo matemático para la reducción de la accidentalidad en la industria siderúrgica’, del catedrático Ricardo Díaz Martín, profesor de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) y Aitor Ibarra Talledo, de Tubos Reunidos S.A.
El trabajo, finalista en los premios Atlante y SCMST, respectivamente, agrega que el momento con mayor probabilidad de que se produzca el accidente se sitúa los lunes entre los meses de mayo y junio, entre las 10.00 y las 12.00 horas o bien entre las 17.00 y 19.00 horas, coincidentes con la segunda hora del trabajo por turnos de este tipo de empresas.
Otra cuestión reveladora del estudio se encuentra en la comparativa de los modelos de predicción obtenidos a partir de datos segregados antes y después de la crisis. Así, el modelo obtenido con el estudio de datos anteriores a 2008 revela una influencia muy elevada del índice contractual que desciende radicalmente en los años de la crisis. Sin embargo, la fatiga por horas extras no tiene una influencia significativa en la siniestralidad ni antes ni después de la crisis.
Esto se explica por la organización del trabajo en turnos de 8 horas típicos en la siderurgia; lo que se traduce en que en tiempos de bonanza económica, cuando se requiere mayor esfuerzo productivo, la empresa opta por contratar eventuales y de ahí la mayor incidencia en la siniestralidad.
El doctor Díaz Martín, catedrático de Ingeniería Química y Materiales adscrito a la Escuela de Ciencias Técnicas e Ingeniería de la UDIMA, explica que el trabajo se basa en una recopilación de todos los accidentes y bajas laborales producidas en la industria siderúrgica desde el año 2003 al 2012. Así, se han obtenido los datos de más de 100.000 accidentes laborales. Los datos recogidos se han analizado y procesado agrupándolos por índices referidos a las variables que caracterizan los accidentes laborales.
De esta manera se establecieron índices relativos a la edad del trabajador, el tiempo de la baja, el coste económico de la baja, la antigüedad del trabajador, el tipo temporal de contrato, el tipo de dedicación del trabajador, las horas trabajadas antes del accidente, el día de la semana del accidente e incluso la hora del accidente.
Se realizó un tratamiento estadístico de regresión multivariable en el que se incluían dichos índices. Las operaciones de regresión produjeron modelos matemáticos que permiten predecir según el tamaño de la empresa por número de trabajadores, las edades de sus trabajadores, las horas extra exigidas a la plantilla, las proporciones de los diferentes tipos de contrato establecidos con los empleados, la antigüedad de la plantilla, las dedicaciones de cada puesto de trabajo y los costes de personal.
De acuerdo con los datos disponibles procedentes de la experiencia, se ha logrado elaborar un modelo matemático que predice con más de un 80% de fiabilidad los costes anuales que tendrá una empresa del sector siderúrgico, conocidos los datos anteriormente citados de la misma.
“Haciendo un paralelismo entre la previsión de la climatología y de la siniestralidad”, señala Díaz Martín, “se puede decir que hemos hecho algo similar a las predicciones que hace el Instituto Nacional de Meteorología, al aplicar modelos matemáticos de movimiento de masas de aire en función de datos de humedad y temperatura”.
En conclusión, Díaz e Ibarra presentan una metodología de previsión de la accidentalidad según las características y sector de la empresa, identificando los puntos críticos a tratar con el fin de evitar el accidente de manera particularizada para cada empresa.
Los Premios Atlante, en los que ha quedado finalista este estudio, los convoca desde 2002 Foment del Treball Nacional, con el fin de estimular la prevención de riesgos laborales en las empresas. Así mismo, el trabajo de Díaz Martín opta a los premios SCMST 2016 de Salud Laboral y Prevención de Riesgos, que convoca la Sociedad Castellana de Medicina y Seguridad del Trabajo.