La UDIMA subraya en el Instituto Cervantes de París la importancia de las TIC en la enseñanza del español con fines específicos

Aurora Centellas, durante el taller en el Instituto Cervantes de París.

El uso generalizado de las nuevas tecnologías ha propiciado una revolución técnica que transforma los procesos y dispara las posibilidades de una sociedad en red interconectada. También a nivel educativo, donde se vive actualmente otra revolución que han propiciado estas herramientas, y que están fomentando "un discente cada vez más crítico, autónomo y consciente de su aprendizaje". Bajo esta premisa acudió Aurora Centellas al taller sobre la incorporación de las TIC en el aula EFE (Español con Fines Específicos), celebrado el pasado fin de semana en el Instituto de Cervantes de París. La directora del Instituto de Idiomas de la UDIMA abordó cómo debe enfocarse el uso de la tecnología para lograr un aprendizaje que atienda las nuevas exigencias del alumno del siglo XXI.

Redacción UDIMA Media / Fotos: Aurora Centellas

En la actualidad hablar de educación implica enmarcarla en un contexto social en el que las tecnologías "son el nuevo escenario para la formación", señaló Centellas. No sólo son un recurso para el aprendizaje, sino el "método emergente" para construir el conocimiento. La sociedad actual demanda una nueva forma de acceder al conocimiento y concibe el aprendizaje como "una experiencia", defendió. Algo que motive al estudiante y le convenza de que "es real" y "conecta con su entorno social". Es decir, como algo que "tenga sentido" para quien busca aprender.

La también directora del Máster Oficial para la Enseñanza del Español como Lengua Extranjera de la UDIMA recordó los dos claros temas del taller sobre la incorporación de las TIC en el aula EFE. Por un lado, reflexionar sobre "cómo favorece su práctica el cambio metodológico (como estrategia didáctica) y, por otro, analizar las posibilidades que ofrecen como herramienta de aprendizaje. No en vano, los nuevos elementos digitales "potencian el desarrollo de las distintas competencias lingüísticas, comunicativas y culturales", afirmó Centellas. Es decir, aquellas relacionadas con la adquisición y comprensión de la información, la comunicación e interacción social y la expresión y difusión de información.

Para la profesora de la UDIMA las actividades que se llevan al aula de español deben plantear la enseñanza - aprendizaje desde un punto de vista "didáctico y planificado". Según explicó, tienen que "centrarse en establecer las condiciones adecuadas para que los estudiantes adquieran y desarrollen capacidades, habilidades y técnicas de comunicación en un contexto determinado desde sus necesidades específicas". Y todo ello "a través de las TIC", desgranó.

Dichas actividades tienen que tener como objetivo personalizar el aprendizaje, aumentar el interés, fomentar la autonomía, favorecer la competencia digital, facilitar la gestión de contenidos y aumentar el input, argumentó. Porque, en definitiva, se trata de ver cómo trabajar las TIC de forma que: "el discente desarrolle [una] competencia digital", ver "qué metodología es la más adecuada para favorecer un proceso constructivo de conocimiento, y discernir si "pueden identificarse y planificarse las tareas y actividades en función del tipo de habilidades que se quieren trabajar", desarrolló Centellas.

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