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Decidir o no decidir: eso es la neurociencia
Vie, 13/05/2022
Podría ser perfectamente una adaptación del soliloquio de Hamlet en estos tiempos líquidos en los que hasta el cerebro semeja ser esa esponja que enjuga todo lo que no es sólido ni gaseoso a golpe de emoción ¿y razón? Porque esa es la cuestión también, verificar qué gana en nosotros, si la razón o la emoción.
Por Luis Miguel Belda
El neurólogo y neurocientífico Pedro Bermejo, profesor de Marketing en la Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA, explica que, a día de hoy, "sabemos que la razón se encuentra en determinadas áreas cerebrales mientras que la emoción se encuentra en otras", y es en este contexto, en la "conjunción entre emoción y razón" donde se encuentran las principales respuestas a lo que hacemos, pues "van a ser las que finalmente nos van a llevar a tomar decisiones concretas".
Lo explica en su intervención en el cuarto capítulo de la quinta temporada de Universo Sostenible, titulado '¿Cómo se estudia la inteligencia emocional?', espacio que se difunde en el reputado programa divulgativo 'La aventura del saber', en La 2 de TVE.
"¿Por qué nosotros tomamos determinadas decisiones?, ¿por qué nos decidimos a comprar un determinado producto?, ¿Por qué nos vemos influenciados por una determinada campaña de marketing? Todo eso lo dicta también la neurociencia", afirma el profesor Bermejo.
Las emociones son parte de nuestra vida cotidiana, sin embargo, durante un tiempo quedaron fuera del mapa de la ciencia. En los últimos años, gracias a nuevas técnicas de neuroimágenes, el enfoque neurocientífico de las emociones ha experimentado un gran desarrollo: se han descubierto funciones del cerebro así como la dinámica neurocognitiva de algunos trastornos y de las emociones.
Las investigaciones neurocientíficas permiten entender los distintos mecanismos neurocognitivos que subyacen a la conducta humana como la motivación, el aprendizaje, la resolución de problemas y cualquier proceso de toma de decisiones.
Desde que Ramón y Cajal estableció cómo fluía la información por el cerebro, hemos aprendido mucho sobre procesos mentales, como la memoria o las emociones, y sobre cómo el cerebro controla los sentidos, las percepciones y las motivaciones. Pero seguimos sin descubrir el modo de curar las enfermedades mentales. Este sigue siendo uno de los retos de la neurociencia.