Día de la Lengua Española. "Palabras significantes, honestas y bien colocadas"

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Hoy, Día la Lengua Española, y también Día del Libro y del Derecho de Autor, no puedo dejar de pensar en el español como lengua viva, y en su difusión, sin recordar a Cervantes y su obra, el Quijote, que sirvió como catalizador del nacimiento del español moderno (Padilla, 1968).

Por Aurora Centellas, directora del Instituto de Idiomas de la UDIMA 

El hecho de que el español sea la lengua materna de casi 489 millones de personas, la segunda lengua más hablada por número de hablantes y la tercera más estudiada es una buena razón para celebrar el idioma de Cervantes, cuyo ideal lingüístico se centró en el habla natural alejada de toda afectación, tal y como queda de manifiesto en el mismo prólogo del Quijote: "No hay para qué andéis mendigando sentencias de filósofos, consejos de la Divina Escritura, fábulas de poetas, oraciones de retóricos, milagros de santos, sino procurar que a la llana, con palabras significantes, honestas y bien colocadas, salga vuestra oración y período sonoro y festivo, pintando en todo lo que alcanzáredes y fuere posible vuestra intención, dando a entender vuestros conceptos sin intricarlos y escurecerlos".

Cervantes defiende la claridad del idioma; como dice Padilla (1968), "limpia de ruido el camino pero no lo cambia", y añade: "la modernidad del Quijote no es estrictamente lingüística, sino formal, temática y metafísica".

La actitud del ilustre escritor ante la lengua se pone de manifiesto en el habla particular de sus personajes; por tanto, es consciente de que la lengua define identidades personales y sociales. Para Cervantes, la discreción, el análisis racional, es lo que debe predominar en el uso de la lengua, pero sin caer en la inmovilidad del idioma (Galván, 2009).

En la actualidad, y según el anuario del Instituto Cervantes, más de 22 millones de personas estudian español como lengua extranjera, esto es, usan la lengua de acuerdo con la sociedad en la que viven. Son cifras muy positivas que nos invitan a reflexionar sobre la expansión y difusión de la lengua, ya que aprender un idioma es adquirir y participar de una nueva identidad que te vincula a otras personas que habitan en el mundo y que responden a él de acuerdo con su condición y la sociedad en la que viven (García Montero, 2020).

Pero hoy toca hablar del español en el siglo XXI y de cómo el idioma de Cervantes, una lengua moderna que es aprendida por millones de personas, se adapta a una sociedad global, compleja y diversa. Hoy nos acercamos y aprendemos español desde la relación humana, desde la aproximación con el otro, desde la tecnología, que empodera, humaniza y favorece de manera impensable dicha relación.

Hoy el español se instala en entornos de aprendizaje para la enseñanza de la lengua, en los que las TIC nos aseguran su expansión y difusión, al crear contenidos digitales en español que nos muestran una fuerte implantación del idioma como lengua de comunicación y de cultura.

El español, la lengua que Freud aprendió para poder leer la obra de Cervantes, es considerado en el contexto internacional como lengua de transmisión cultural, científica y de uso. Esto es, por tanto, motivo de celebración.

Por otro lado, el Día Internacional de la Lengua Española coincide con el Día del Libro y, por este motivo, no podemos dejar de pensar en los jóvenes lectores que, inmersos en la tecnología, no encontrarán en el Quijote experiencias cotidianas que conecten con su realidad, pero sí podrán gozar de sus extraordinarias aventuras y descubrir que el discurso del Quijote, al igual que el discurso tecnológico, está próximo a la vida de los seres humanos.