Presentado el libro 'Violencia y Ciberviolencia de Género' para "formar y sensibilizar" sobre los nuevos delitos de pareja en la red

Los autores del texto, María José Garrido y Ángel G. Collantes, en el centro.

Como su propia coautora señala: "Este libro es otro libro sobre violencia de género, sí". Pero porque "todavía es necesario" para comprender esta delicada y complicada tipología delictiva, caracterizada por su "emocionalidad". Y más si entran en juego las posibilidades que brinda Internet. Con estas palabras la doctora en Psicología y profesora de la Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA, María José Garrido comenzó su exposición este martes, en la presentación de Violencia y Ciberviolencia de Género (Tirant lo blanc).

Texto y Fotos: Alberto Orellana

Acogida en el ilustre escenario del Real Casino de Madrid, la cita sirvió no sólo para presentar el libro en sociedad, como valoró el otro coautor y doctor en Criminología de la UDIMA, Ángel García Collantes. También permitió establecer un debate con el público sobre esta particular materia delictiva y los múltiples comportamientos y componentes que la rodean. Los de antes y los que ahora se desarrollar en el ciberespacio.

El texto tiene fundamentalmente dos objetivos: por un lado "formar, informar y sensibilizar" ("FIS") a los profesionales directos e indirectos en esta materia. Por otro, acercar a la población los nuevos comportamientos delictivos cometidos en el marco de una relación de pareja interpretados en el ciberespacio, explicó Garrido. La también capitana de la Guardia Civil conoce de cerca la problemática de la violencia de género, y se plantea si aún no estamos suficientemente sensibilizados con esta lacra.

"Y aún más importante, ¿lo están los agentes que trabajan en esta materia?", apunta. Según defiende, hay que conocer las características de este tipo de delitos, y atender a la víctima "como si fuera la primera". Porque en este delito confluye "un laberinto de variables que ejercen influencia (emocionales, afectivas, dependencias, sentimientos encontrados…)".

Como aseveró, es necesario desarrollar habilidades de "comunicación" y una "sensibilidad especial" para atender a estas víctimas; sin necesidad de ser psicólogos o analistas de conducta. Porque hay que pensar en qué pasará después de la agresión, donde el factor de la culpabilidad tiene una gran peso, abundó.

Aclarando conceptos

El libro trata de repasar esos primeros auxilios psicológicos, y también hacer una distinción de los conceptos como violencia de género y homicidio de pareja. ¿Sabemos distinguirlos? Porque tienen un denominador común: violación de derechos de la mujer, pero son dos fenómenos diferentes. "Y socialmente se conciben como intercambiables", comentó.

Respecto a los nuevos comportamientos punitivos en la red (sexting, sextorsión, ciberstalking) e incluso los tradicionales que se convierten al espacio cibernético, ¿sabemos diferenciar los comportamientos no delictivos pero que son preocupantes, caldo de cultivo de aquellos? ¿Qué diferencias hay entre el sexting y el delito de sexting?

"El libro pretende acercar al ciudadano en general y al profesional en particular todos estos comportamientos criminales cometidos en el marco de una relación de pareja (LO. 2004) en el espacio digital", resumió Garrido. "Al final todo se centra en la necesidad de percibir seguridad respecto a las nuevas tecnologías".

Sintetizar y actualizar

"Cuando comenzamos a diseñar lo que sería este libro, nos fijamos en esos tres aspectos FIS. Queríamos hacer un libro que no asustara al verlo, que sintetizase esos tres conceptos: que permita formarse, informarse de estos conceptos en las redes y para sensibilizarse", añadió García Collantes.

El presidente del Colegio de Criminólogos de Madrid aclaró cómo el texto se planteó desde una perspectiva múltiple, donde entran psicología, sociología, derecho y, por supuesto, criminología. Así mismo, García Collantes quiso aprovechar para recodar a las 1.086 víctimas de violencia de género contabilizadas desde 2013, de las que como sociedad "nos tenemos de avergonzar", reflexionó.

Una vez conceptualizada la violencia y la ciberviolencia, tocaba empezar a diferenciar los distintos elementos específicos: micromachismos, violencia doméstica, violencia de pareja, ciberstalking, cibercontrol, sexting… "que tenemos que empezar a manejar", matizó. Antes la violencia de género se circunscribía al entorno de contacto físico. "Pero hoy en día con un terminal y conexión a Internet se puede hacer violencia y mucho más daño".

"Y en los entornos escolares pasa igual". Antes se subscribían al entorno físico de la escuela, pero ahora se traslada al espacio cibernético. "Hay que dar mucha formación para que los padres y formadores sean capaces de ver detalles como no querer comer, no querer ir al colegio, bajar la capacidad de estudio… Elementos para los que la sociedad no está preparada ni acostumbrada".

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