La educación emocional en el aula como respuesta al acoso y el conflicto

La Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA, a través de la profesora Isabel Martínez, y la Universidad de Valencia (UV) trabajan, en el marco del Grupo de Investigación en Inteligencia Emocional (Greine), en la mejora de la gestión de conflictos entre los escolares en Educación Primaria, con el fin de innovar y mejorar la práctica educativa real en este ámbito.

Redacción UDIMA Media

Dicho Grupo de Investigación colabora desde hace años con el colegio Herrikide de Tolosa (Guipúzcoa), donde se implementa, entre otras estrategias promotoras de la educación socioemocional, una formación centrada en la mediación y la regulación emocional para la mejora de la convivencia y la prevención del acoso escolar. Como resultado de ello, el centro escolar propuso a estos investigadores de la UDIMA y de la UV evaluar la eficacia de su intervención.

De este modo, se llevó a cabo un estudio con 78 estudiantes escolarizados en quinto de Educación Primaria del centro, así como sus respectivos profesores y el equipo directivo y de orientación. Se analizaron los cambios producidos, por un lado, en el grado de inteligencia emocional y, por otro, en la percepción del bullying y del clima social del aula que tenían los alumnos de 5º de Primaria que recibieron la formación para la gestión de conflictos, que se desarrolló durante el primer trimestre del curso 2020-21.

En estos días, el centro escolar Herrikide ha acogido una formación, tanto al equipo directivo y claustro como a las familias, en la que la profesora de la UDIMA, Isabel Martínez, explicó los resultados y la importancia de este tipo de investigaciones en el contexto educativo, al tiempo que se realizaron diferentes dinámicas activas y se valoraron futuras líneas de investigación conjunta.

En conclusión, tal y como afirma la directora del Grado en Magisterio de Educación Primaria de la UDIMA, Isabel Martínez, los resultados del estudio llevado a cabo apoyan la eficacia de los programas de mediación, especialmente en la reducción de los roles negativos que adoptan los alumnos en los conflictos escolares.

Junto a esto, la mejora en la percepción del clima en el aula alcanzada tras la impartición del programa también es un factor relevante, ya que un entorno escolar positivo se relaciona con menores conflictos y comportamientos de acoso, así como en un mejor desarrollo de los estudiantes.

Debemos enseñar a los alumnos desde pequeños a gestionar de manera eficaz los conflictos a los que se “enfrentan” en su día a día, viéndolos como oportunidades de avance más que como experiencias perjudiciales.

Los avances de esta investigación, que lleva por título ‘Hacia una escuela emocionalmente inteligente: Evaluación de un programa de formación en resolución de conflictos en Educación Primaria’, serán presentados en el VII Congreso Internacional en Contextos Psicológicos, Educativos y de la Salud, que se celebrará entre el 30 de noviembre y el 3 de diciembre de 2021.

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